300 entradas... ¡¡au!! (y un millón de gracias)

Era un domingo por la tarde, varias semanas después de mi cumpleaños, cuando creé este blog. Eso fue el 29 de marzo, cosa que convierte este blog en un pequeño monstruo de 8 meses y pico de antigüedad.

El motivo de esta entrada son las trescientas (300) entradas que cumplirá junto con esta entrada. 300 entradas... me parecen muchas, teniendo en cuenta que sin siquiera hacer un cálculo aritmético, superan la entrada diaria. Eso representa muchos posts, y espero que mucho contenido. No siempre he publicado entradas con un gran valor añadido, pero espero que sí bastantes.

Si bien no tenía una idea muy clara de qué quería hacer cuando lo empecé, ahora el concepto está mucho más claro en mi cabeza. Creo que eso, por sí solo y para mí a nivel personal, es algo muy valioso.

El blog es algo que nunca esperé que fuera gratificante. Había tenido otros blogs, sí, pero nunca habían sido tan satisfactorios como éste. Creo que la diferencia entre aquel (pues básicamente puedo cnotar uno de ellos, lo que tuve en Windows Live Spaces y que todavía debe estar flotando entre los ceros y unos de la red) y éste es que ahora me dedico a compartir cosas. Comparto traducciones, noticias y lo que me voy encontrando por ahí. También comparto cosas personales, claro, pero intento que la proporción de estas últimas dentro del todo, no sea muy grande. ¿Por qué? Pues porque mi vida es muy interesante... pero sobre todo lo es para mí y para los que me conocen personalmente. Para mi blog quiero ese algo más, esas inquietudes, las preguntas, las opiniones que me gusta lanzar, como una carta abierta al mundo... y creo que en ese sentido he aprendido mucho con este blog, pero sobre todo leyendo a otros.



Desde que comencé este blog, he aprendido lo que es interactuar a estos niveles con otras personas. He conocido lugares estupendos y blogs interesantísimos que sería imposible enumerar y describir ahora. He conocido a personas, sobre todo, enormes. Personas que me alegro muchísimoo de haber conocido. Y es que la curiosidad en este mundo, nos lleva a conocer gente muy muy interesante. Debo dar las gracias a esas personas, porque muchas veces sin siquiera saberlo, me han enseñado un poco sobre este mundo de los blogs, del que he llegado a sentirme parte integrante. Comentar en otros lugares, que comenten aquí, es una experiencia de aprendizaje y enriquecimiento que me llena mucho en este mundo virtual.

Lo que me ha sorprendido de esta andadura (hasta ahora) es la cantidad de gente que llega a entrar a veces por aquí. Acostumbrada con el otro blog a que no entrara casi nadie, esto ha sido como una sensación de ¡guau!. Pero me encanta, me encantan los comentarios y las aportaciones. Me encanta el feedback y el buen rollo que existe en este mundillo blogger, y por eso, ahora mi próxima meta es llegar a cumplir un año con esta andadura. Y espero seguir intercambiando experiencias con todos vosotros.

Gracias por pasaros por aquí y tomaros el tiempo de leer mis entradas, más o menos tontas. Gracias por escribir como escribís en vuestros propios blogs. Gracias por enseñarme cosas. Gracias por las críticas. Gracias por las buenas palabras. Gracias por el cariño. GRACIAS.